El arquitecto André de Sá Moreira, encargado del proyecto, nos propuso como inspiración inicial un diseño icónico de la arquitecta Lina Bo Bardi para el Museo de Arte de São Paulo (1968). Consise en cubos de hormigón con una cuña de madera que sostiene el vidrio expositor, liberando las paredes del museo y buscando fluidez de recorridos.

Inspirados en este concepto, desarrollamos un innovador sistema mecánico que permite ajustar el cubo a cualquier grosor de panel. Aunque la disposición expositiva exige colocar los cubos contra la pared, esto nos llevó a diseñar un mecanismo de accionamiento frontal, que permite deslizar la cuña con precisión y lograr la apertura necesaria para asegurar los paneles.